Hoy
os traigo un cuento que invita a reflexionar sobre lo importante que es ser
capaz de desconectar de las preocupaciones y aparcar los problemas cuando es
necesario. Veamos cómo lo consigue el protagonista:
“Había contratado un carpintero para ayudarme a
reparar mi vieja granja.
Él acababa de finalizar su primer día de trabajo que había sido muy duro. Su sierra eléctrica se había estropeado lo que le había hecho perder mucho tiempo y ahora su antiguo camión se negaba a arrancar.
Mientras lo llevaba a su casa, permaneció en silencio y con la mirada sombría.
Él acababa de finalizar su primer día de trabajo que había sido muy duro. Su sierra eléctrica se había estropeado lo que le había hecho perder mucho tiempo y ahora su antiguo camión se negaba a arrancar.
Mientras lo llevaba a su casa, permaneció en silencio y con la mirada sombría.